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El hecho de vivir en una casa puede hacer que surjan humedades en la misma. Elementos como la ducha, la cocina e incluso la respiración, son algunos de los causantes habituales de la humedad. Esto a la larga puede acabar siendo negativo para nuestra vivienda.

También la zona geográfica en la que se encuentre situada la construcción influye en gran medida. Aquellas que estén en zonas costeras pueden tener más humedad debido a su cercanía al mar. Los profesionales de la fontanería en Sevilla como Fontariscal ofrecen algunas de las soluciones más eficientes para acabar con la humedad.

Tecnología

Hay dos tipos de elementos tecnológicos que nos permiten conocer la humedad de una casa. Por un lado, la cromotografía, que por medio de tiras nos indicarán si tenemos un ambiente seco o húmedo en nuestra vivienda. Mientras que el higrómetro ofrece cuál es el grado exacta de humedad de una casa. Pudiendo diferenciar entre digitales, de condensación o de absorción.

Observación

Podemos también utilizar algunos elementos de nuestro hogar como método de reconocimiento de la humedad. El suelo de la madera, las puertas o incluso instrumentos musicales pueden sufrir daños debido a la humedad. En muchos casos causa deformaciones o problemas de uso que terminan en roturas. Los cristales en espejos y ventanas también pueden ser un buen indicativo debido a la formación contínua de vaho.

Hacer frente a la humedad

Cuidar nuestra casa debe de ser esencial. Por ello debemos de seguir algunos de los consejos más frecuentes para que no acabe en destrozo.

• Ventilar continuamente las estancias. Debes de hacerlo correctamente, sobre todo en aquellas zonas en las que hay más condensación de agua como pueden ser la cocina o los baños.
• Uso moderado de la calefacción. Debes de tener en cuenta que en invierno no es aconsejable pasar de los 20 grados, ya que podría ayudar a que se creara la humedad y así favorecer al deterioro de la vivienda.
• Hay que dejar un margen entre los muebles y la pared para que circule mejor el aire entre ellos.
• Hay que tener cuidado con el número de plantas que tenemos en nuestro hogar. Una gran cantidad de ellos favorece la aparición de la humedad, siendo a largo plazo negativo para nuestra vivienda.
• Evita tender en el interior. Tender la ropa dentro de casa no es nada aconsejable si quieres evitar la humedad.

En algunas ocasiones la humedad proviene de un defecto estructural del edifcio, por lo que tienes que comunicarlo a los responsables del edificio para poder solucionarlo. Estos tomarán cartas en el asunto y evitarán que se produzcan daños graves que afecten por completo a tus vecinos.

Confía en los profesionales de la fontanería en Sevilla para ayudarte a arreglar problemas relacionados con la humedad en tu hogar.